Queda especialmente top en almendrados o rasgados ya que potencia su forma natural, pero si no es tu caso nada de echarte para atrás porque este formato no entiende de límites…
- Si tienes los párpados caídos o encapotados: con él solventarás ese gap que hace que tu rabillo de arriba siempre te quede extraño. ¡Es tu esperanza para no quedarte atrás en esta fiebre por el eyeliner!
- Si tienes muchas arruguitas en la zona del contorno: delineado fino y procura evitar el negro para no endurecer o remarcar. Un marrón luminoso es perfecto.
- Si tienes los ojos muy redondos: comienza con una línea muy fina desde el lagrimal y engrósala a partir del último tercio hasta el final. Eso sí, cuida que siempre el rabillo vaya directo hacia arriba.
Si los tienes pequeños: te echará un buen capote alargándolos a lo ancho, estirándolos.
Diferente pero con el mismo tirón que el resto de sus semejantes —será por versiones de delineados….— el undereyeliner esconde algo, y ese algo se llama estilo. ¿No lo vas a intentar?
*Test Instrumental en 26 sujetos.