Calidad, un requisito indispensable
Desde siempre, uno de nuestros valores primordiales ha sido ofrecer productos cosméticos que respondan a los más altos estándares de calidad. La excelencia es nuestro objetivo final y está presente durante toda la cadena de producción.
- Materias primas: dedicamos mucho tiempo a seleccionar las mejores para que sean de excelente calidad y cumplan con las expectativas de nuestros consumidores.
- Proveedores: para encontrarlos realizamos exhaustivas auditorías que nos permiten trabajar con equipos externos que conocemos y en los que confiamos.
- Envases: controlamos estrictamente la calidad del envase final, lo cual implica múltiples pruebas previas en el laboratorio. De media, un producto atraviesa 100 controles de calidad.
- Producto terminado: los empleados comprueban la compatibilidad de la fórmula con su envase.
- Resistencia: los colaboradores comprueban que el producto resista los posibles choques y se mantenga intacto.
Una fórmula es una compleja combinación de activos que interactúan con otros ingredientes. Estos deben ser preservados de tal forma que permanezcan estables para lograr una efectividad óptima. El rendimiento es un factor determinante antes de cualquier lanzamiento. De hecho, en L'Oréal contamos con un departamento especializado en métodos de evaluación del rendimiento.
Vale la pena subrayar que, antes de que una fórmula se comercialice, ¡más de 100 expertos han participado en su creación! Y es que nuestros investigadores trabajan a diario para desarrollar productos para el cuidado de la piel con el mejor desempeño posible, integrando tecnologías de formulación y activos de eficacia probada in vitro e in vivo, métodos biofísicos instrumentales y pruebas clínicas realizadas por institutos independientes.
Nuestros productos hacen lo que dicen
Tu seguridad, nuestra prioridad absoluta
Cada uno de nuestros ingredientes y productos es sometido a rigurosas evaluaciones de seguridad antes de comercializarse e incluso después. El proceso de verificación comprende tres etapas que abarcan desde la concepción de la fórmula hasta la puesta a la venta del cosmético.
Control de las materias primas
Evaluación de las materias primas
Al final de esta fase, se determina una concentración máxima que se puede utilizar con total seguridad de cada materia prima. Para contar con un margen importante, las concentraciones en el producto cosmético final son siempre al menos 100 veces más bajas que la dosis máxima aplicable sin provocar efectos adversos.
La tolerancia de los productos para el cuidado de la piel se evalúa en todos los tipos de piel, incluidas pieles sensibles, y es sometida a test bajo control dermatológico con un mínimo de 600 aplicaciones. Una vez que nos aseguramos de haber alcanzado un máximo grado de seguridad, nuestros productos son evaluados por institutos independientes. Antes de pasar por las pruebas de seguridad clínicas, también probamos nuestros ingredientes o fórmulas en piel reconstruida.
Red internacional de cosmetovigilancia
“En L’Oréal Paris nos preocupamos por tu piel. La tolerancia de cada fórmula es testada bajo control dermatológico con un mínimo de 600 aplicaciones para saber que es segura para todos los tipos de piel. Además, utilizamos ensayos clínicos realizados por institutos independientes para probar nuestros resultados y estamos comprometidos con un mundo sin test en animales”.
Elisabeth Bouhadana, Directora Global de Comunicación Científica de L'Oréal Paris