MOMENTOS ‘BEAUTY’ QUE TENÍAS PENDIENTES
Una limpieza facial profunda (20 minutos)
Vale que a diario te desmaquillas y te echas tu hidratante antes de dormir pero, ya sabes que conviene hacerse una limpieza en serio un par de veces a la semana. El ritual es este: desmaquillante, tónico, multimasking de mascarillas de Arcillas Puras —dejándolas reposar— y crema. Te preguntarás cómo podías vivir sin ese cutis tan suave y limpio...
Una sesión de mejora de cejas (15 minutos)
¿Las tienes un poco abandonadas? ¿Te gustaría aprender a maquillarlas de forma natural? Aprovecha que tienes tiempo para depilarlas, darles forma, rellenarlas y peinarlas. Practica con el lápiz de cejas Brow Artist Skinny Definer que es tan preciso que te permite dibujar ‘pelo por pelo’. Después, en tu día a día, ¡te saldrá solo!
Un poco de investigación de campo (30 minutos)
¿Usas un champú realmente adecuado a las necesidades de tu pelo? ¿Conoces los beneficios de sus ingredientes? Este podría ser un buen momento para valorar si tu rutina capilar habitual va por buen camino.
Un intensivo de mascarilla capilar (toda la tarde o la noche)
Humedece tu cabello, aplica la mascarilla y deja que actúe largo y tendido mientras te haces un maratón de alguna serie o duermes. Después, lava tu cabello… ¡y alucina!
Una tabla de ejercicios de yoga facial (15 minutos)
Elasticidad, tonicidad, relajación… ¡estos masajes son puro bienestar!
Un momento reservado para fortalecer tus pestañas (5 minutos)
Como hoy no vas a aplicarte la máscara, ¿qué tal si pruebas un sérum de pestañas? Clinically Proven de L’Oréal Paris, por ejemplo, mejora su estado en 8 semanas. Eso sí, para notarlas más fuertes y resistentes, tendrás que echártelo dos veces al día. ¿Habemus nuevo básico en tu rutina diaria?
Una clase de 'decluttering' de maquillaje (media hora, salvo que roces el nivel de coleccionista)
¿Y si te deshaces de esas sombras o de los pintalabios que conservas desde tu adolescencia?
Un plus de nutrición capilar
Para aprovechar todo el potencial de tu aceite de pelo, te planteamos dos opciones: déjatelo puesto toda la noche (con el cabello envuelto en una toalla caliente) o úsalo para hidratar el cuero cabelludo, masajeando unos minutos mientras actúa y lava después.
Un cambio de 'look' (menos de una hora)
Si siempre has querido aprender a teñirte el pelo en casa, esta puede ser una gran ocasión. Elige un tono no demasiado diferente al tuyo y tómate tu tiempo para la aplicación del tinte. ¡Tu autoestima y tu melena van a pegar un subidón impresionante!
Una limpieza de brochas a fondo (20 minutos)
Esto sí que lo tenías pendiente, ¿verdad? Ya que te vas a poner, hazlo bien: lávalas con champú y agua, aclara, retira el exceso de humedad con papel y déjalas secar en horizontal.