Antes de meternos en faena, vamos a repasar los cuidados comunes a cualquier rutina capilar. ¡He aquí el auténtico poder de 3!
- Un aceite para el pelo. Nadie debería perderse la sensación de suavidad, brillo y fijación ligera que deja un buen aceite capilar.
- Una mascarilla a tu medida. Ficha una que te ayude a reparar a fondo tu melena y, lo que es más importante, ¡dale tiempo para que actúe!
- Un kit de perfeccionamiento capilar. Es 100% personalizable y puede incluir un sérum antiencrespamiento, un protector de calor, una crema de peinado… ¡lo que tu pelo te pida!
Pasamos a la segunda parte del plan: desarrollar una rutina de cabello personalizada según tus necesidades.