Lograr una piel radiante y saludable, esa que irradia belleza natural, es un objetivo alcanzable si incorporamos una rutina facial adecuada a nuestras necesidades. Pero, ¿por dónde empezar? En este artículo, te guiaremos paso a paso para que descubras el orden perfecto en tu rutina facial de skincare o ‘facial skincare routine ’ y que aproveches al máximo los beneficios de cada productoL'Oréal Paris .
Antes de entrar en materia, ¿qué es el skincare? Skincare, o cuidado de la piel, es una rutina que incluye una serie de pasos y productos que nutren, limpian y protegen la piel para mantenerla saludable y en su mejor versión. Una buena rutina de skincare no solo trata de mejorar la apariencia, sino de optimizar la salud de la piel a largo plazo, adaptándose a las necesidades de cada tipo de piel, ya sea grasa, seca, mixta o sensible.
Sigue estos pasos, y en este orden, y descubre cómo una rutina facial de skincare bien estructurada puede transformar tu piel y ayudarte a lucir un rostro saludable y luminoso.
Paso 1: Limpieza del rostro
El primer mandamiento de cualquier rutina de cuidado facial de skincare, ya sea de día o de noche, es la limpieza. Eliminar las impurezas, la contaminación ambiental y los restos de maquillaje es esencial para preparar la piel para los siguientes pasos.
Para una limpieza suave, pero efectiva, te recomendamos nuestra rutina de limpieza facial, que se adapta a diferentes tipos de piel.
Si tu piel tiende a ser grasa, nuestra rutina facial para piel grasa te ayudará a controlar el exceso de sebo y prevenir imperfecciones sin resecar.
Recuerda que la limpieza facial no solo se trata de usar agua y jabón. Es importante elegir productos específicos para tu tipo de piel y que sean lo suficientemente suaves para no dañar la barrera protectora de la piel.
Paso 2: Exfoliación (no a diario)
La exfoliación es como un soplo de aire fresco para tu piel, liberándola de células muertas y potenciando su luminosidad natural. Sin embargo, es importante no excederse. Realiza este paso una o dos veces por semana, dependiendo de la sensibilidad de tu piel.
Elige un exfoliante suave que se adapte a tu tipo de piel y aplícalo con movimientos circulares, evitando la zona del contorno de ojos.
Una exfoliación excesiva puede causar irritación y deshidratación. Si tienes la piel sensible, es mejor optar por exfoliantes enzimáticos o mecánicos muy suaves.
Paso 3: Mascarilla
Las mascarillas faciales son un verdadero regalo para tu piel, un momento de spa en casa. Hidratantes, purificantes, revitalizantes… existe una mascarilla para cada necesidad.
Aplica la mascarilla sobre la piel limpia y seca, evitando el contorno de ojos y los labios. Relájate y déjala actuar durante el tiempo indicado en el envase. Retira con agua tibia o con la ayuda de un disco de algodón humedecido.
Aprovecha este momento para relajarte y disfrutar de un momento para ti. Puedes aplicar la mascarilla mientras te das un baño caliente o escuchas música relajante.
Paso 4: Tónico facia
Paso 5: Sérum o tratamiento
El sérum facial es un concentrado de activos que penetra en las capas más profundas de la piel, proporcionando una acción específica: antiedad, hidratante, antimanchas…
L'Oréal Paris te ofrece una amplia gama de sérum facial, desde el icónico Revitalift Filler + Ácido Hialurónico hasta soluciones específicas para cada necesidad.
Aplica unas gotas de sérum sobre la piel limpia y seca, antes de la crema hidratante. Extiéndelo con suaves movimientos circulares ascendentes.
Es importante elegir un sérum que se adapte a las necesidades específicas de tu piel. Si no estás segura de cuál elegir, puedes consultar con un dermatólogo o esteticista.
Paso 6: Contorno de ojos
La piel del contorno de ojos es la más delicada del rostro y requiere de un cuidado especial. Utiliza un contorno de ojos específico para hidratar, proteger y combatir los signos de fatiga, como ojeras y bolsas.
Aplica una pequeña cantidad de contorno de ojos con el dedo anular, dando ligeros toques desde el interior hacia el exterior del ojo. No arrastres el producto.
El contorno de ojos debe aplicarse con el dedo anular, ya que es el que menos fuerza tiene y así evitaremos estirar la piel de la zona.
Paso 7: Crema hidratante
La crema hidratante es el broche de oro de cualquier rutina facial, ya que aporta la hidratación necesaria para mantener la piel suave, elástica y protegida de las agresiones externas.
Elige una crema hidratante que se adapte a tu tipo de piel y a tus necesidades específicas. Por la noche, opta por una crema de noche que repare y regenere la piel mientras duermes.
Aplica la crema hidratante sobre el rostro y el cuello con movimientos circulares ascendentes, evitando la zona del contorno de ojos.
La crema hidratante no solo hidrata la piel, sino que también ayuda a sellar los productos aplicados anteriormente, potenciando sus efectos.
Paso 8: Protección solar: tu imprescindible
La protección solar es fundamental para prevenir el envejecimiento prematuro y proteger la piel de los daños causados por los rayos UV.
Para una protección completa, te recomendamos nuestro Fluido Hidratante Anti-manchas con Filtro UV SPF50+ y Niacinamida. Este fluido no solo protege tu piel del sol, sino que también la hidrata, ayuda a prevenir y corregir las manchas, y le aporta un aspecto más uniforme y joven. Además, con su fórmula avanzada con niacinamida, las manchas oscuras se difuminan visiblemente, transformando tu piel y dejándola con un aspecto más uniforme y joven.
Aplica el protector solar como último paso de tu rutina facial, incluso en días nublados. Recuerda que la protección solar es la mejor inversión para una piel sana y joven a largo plazo.
La protección solar debe aplicarse incluso en días nublados, ya que las radiaciones UV atraviesan las nubes.
Recuerda que la constancia es clave para obtener resultados visibles en tu piel. Sigue una buena rutina facial diaria, mañana y noche, ¡y pronto notarás la diferencia!
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