Una vez que hayas terminado con el color de fondo de tu párpado, empieza lo bueno. Es importantísimo
dar con la inclinación del rabillo adecuada porque de ello dependerá la expresión de tus ojos. Así que nada, si eres
principiante, cárgate de paciencia porque esto es prueba y error, prueba y error. ¿Te lo ponemos un poquito más
easy? Elige la gama de
eyeliners Perfect Slim de L’Oréal Paris y aprovéchate de su punta de 0,4 mm para conseguir un trazo finísimo, rotundo y de larga duración. Los tienes en 5 colores a cuál más bonito, lo cual es otro punto bastante a favor. ¿Te los quieres
probar en directo para ver cuáles te quedan mejor? Solo tendrás que hacer clic en los productos que tienes debajo, activar tu cámara y abrir bien los ojos.
Pero bueno, al grano. Nuestro consejo es el siguiente: desde el extremo de tu ojo, y tomando como referencia la inclinación de tus pestañas inferiores —muy importante para no caer en miradas tristes—, traza una guía bastante larga. Una vez que las tengas, dibuja una línea a ras de tus pestañas superiores y continúa con ella hasta que se cruce con la guía que habías dibujado previamente. ¿La tienes? Pues ahora solo tienes que rellenar ese triangulito que se ha formado. No olvides que
buscamos un ‘eyeliner’ fino, así que nada de repasar los trazos. Por eso Perfect Slim te va a venir también, por su aplicación ultraprecisa. El toque del lagrimal de la imagen nos tiene directamente enamoradas.