Con la presencia del verano, llega el sol y la playa, la calidez de los días, los paseos por la orilla del mar… pero también aparecen las temperaturas extremas, la sensibilidad, las quemaduras o manchas causadas por los rayos solares, debido a las extensas horas de exposición al sol.
El sol es un bien preciado, pero también tiene muchos peligros si no utilizas los productos adecuados para proteger la piel de los posibles daños ocasionados. Desde los primeros rayos de sol, comienza a cuidar tu piel exponiéndola al sol razonablemente. ¡Te lo agradecerá!
UVA & UVB
Los rayos UVB son los responsables de las quemaduras solares. Alcanzan la epidermis, estimulan la producción de melanina y, como consecuencia, la aparición del bronceado. Pero sobre todo son los responsables de las quemaduras solares, y de una alteración del ADN de las células cutáneas.
Los rayos UVA son los responsables del envejecimiento prematuro de la piel. Están presentes todo el año, en todas las latitudes, atraviesan las nubes y los cristales. Alcanzan la dermis y alteran las estructuras cutáneas en profundidad. Son los principales responsables del envejecimiento prematuro de la piel: arrugas, manchas, pérdida de elasticidad, deshidratación…, penetrando en profundidad en la dermis. Los UVA dañan los tejidos de sujeción de la piel, destruyendo los fibroblastos, arrastrando las reacciones radicales en cadena y provocando la aparición de arrugas y manchas.
Por ello, debes procurar evitar toda exposición entre las 11h y las 15h. Comienza por exponerte algunos minutos fuera de estas horas antes de aumentar la duración, así tu bronceado será más bonito y sobre todo tu piel estará protegida.
PROTECCIÓN Y CUIDADO PARA TU PIEL
Tu rostro se expone diariamente al sol, aunque no estés en la playa. De hecho, se deshidrata y envejece más rápido. El cuidado de la piel es muy importante y debes realizarlo con productos específicos, como la crema Activa antiarrugas & Manchas Solares ( FPS 15, 30 o 50).
No solo debes proteger tu rostro del sol, tu cuerpo también debe tener unos cuidados básicos y, para ello, aplica la gama Solar Expertise. Su sensación de efecto helado proporcionará a tu piel una sensación de frescor, ligereza y confort. Podrás utilizar cremas con factor de protección solar (FPS) desde 50, para pieles muy poco bronceadas o indicadas para niños, hasta 10, para pieles muy bronceadas y que han estado expuestas al sol durante bastantes sesiones.
Aun así, recuerda siempre aplicar tu leche o spray solar, sea cual sea el tono de tu piel, ya que, aparte de protegerte, conseguirás prolongar tu bronceado y mantener una piel más suave y joven. ¡Mantén una piel 100 % bronceada y 100 % protegida!
Recuerda que la sobreexposición al sol es peligrosa. Como consejo, no te expongas durante demasiado tiempo, renueva frecuentemente la aplicación del protector solar que utilices y procura usar siempre protecciones altas adaptadas a tu tipo de piel. Cuida tu piel y muestra un bronceado sublime y dorado. ¡Disfruta del verano!