Cómo hacerte una trenza de raíz sin ayuda (y sin espejo)

Te creemos. Más de una vez casi lo consigues con un videotutorial pero, entre ir pausándolo sobre la marcha y el cansancio por tener los brazos en tensión, al final has terminado rindiéndote y peinándote como siempre. ¿Hacemos un último intento? ¡Venga, va, danos una oportunidad! 

Vaya gusto le estamos cogiendo al DIY. Pues, dentro de 10 minutos, visualízate tachando un bullet más de tu lista de Cosas que aprender antes de los… ¡Ah, no, si para esto no hay edad! Vamos con los 6 pasos que te separan de una trenza de raíz perfecta.

Tu pelo tiene que estar lo más manejable posible para que te sea más fácil trabajarlo y también para que el acabado final luzca mejor. Lo primero que tienes que hacer es cepillarlo en profundidad (ya sabes, primero las puntas y lo último las raíces) y, a continuación, aplicarte el Sérum Stop Frizz para controlar el encrespamiento. Una vez que termines la trenza, y esto es lo único que no admite negociación, aplícate la Laca Elnett de L’Oréal Paris para despreocuparte de la fijación (y del brillo).

Nos referimos a si la prefieres muy compacta o más bien desenfadada. Conseguir un acabado u otro está completamente en tus manos y es directamente proporcional a la presión que ejerzas a la hora de trenzar tus mechones. También que cojas mechones más gruesos o más finos influirá un montón en el resultado final. ¡Tú decides!

Lo que toca es calcular a qué altura te gustaría que empezase tu trenza de raíz (casi en la frente, muy en la coronilla, más abajo…) y, en base a tu preferencia, hacerte un semirecogido y dividir tu cabello en dos partes. La del semirecogido y la del resto de tu pelo. Y ahora, comienza a trenzar normal en la parte de arriba. 

¿Ya te has hecho el primer cruce de tu trenza de tres cabos, no? Pues ahora tienes que ir integrando los laterales de tu pelo (los que no estaban en el semirecogido) en esa trenza frontal. Es decir, sigues trenzando como siempre —en el orden de siempre—, pero incluyendo los mechones de tus extremos. Primero los del lado derecho, y luego los del izquierdo.

Repite este proceso hasta que llegues al comienzo del cuello y procura no despegar mucho la trenza de tu cuero cabelludo. Que te quede los más ceñidita a la cabeza posible. Una vez que sobrepases la nuca, ya tendrás entre manos la clásica trenza de tres cabos. Es el momento de respirar (por fin) y de continuar hasta el final —o hasta la mitad, que lo mismo no quieres terminar en las puntas—.

Y para el broche se nos ocurre que… ¡le des tu toque! ¿De verdad que pensabas cerrar con la goma negra de toda la vida? No way! 'Scrunchies', pasadores, lazos, diademas… Esta es una llamada a los accesorios del mundo. ¡Apoderaos de esta trenza de raíz!

10 minutos. Ni más, ni menos. Ya sabes cómo hacerte una trenza de raíz. Ahora, baja tus brazos, descansa, y vuelve a subirlos inmediatamente ¡porque esto hay que celebrarlo!