Si te decimos que estás a punto de aprender una técnica de maquillaje efecto ‘buena cara’ con solo un par de estratégicos brochazos, seguro que nos prestas mucha atención. Y esto es, precisamente, lo que promete el blush draping, una nueva forma de maquillarte que puede recordar al famoso contouring, pero sin el efecto máscara que solía quedar con este. Ahora puedes conseguir unos pómulos definidos y un rostro iluminado con el blush draping de forma muy sencilla. Y, te prometemos que, lo más complicado será pronunciar su nombre.
Blush draping, en qué consiste esta técnica de maquillaje
Blush draping es la técnica de maquillaje que sirve para esculpir el rostro y marcar los ángulos faciales con colorete. Dicho así suena muy sencillo y no tiene mayor complicación cuando te pones manos a la obra porque, lo único que debes hacer, es aplica el colorete por las mejillas (con ayuda de una brocha o una esponja de maquillaje) y subir hasta la sien, con movimientos circulares, sobre la línea del pómulo. Para terminar, y si te apetece darle más potencia, también puedes maquillar el párpado móvil con el mismo tono de colorete.
Coloretes para conseguir la técnica blush draping
Elegir un buen colorete es fundamental para que el blush draping quede perfecto. Al margen de saber qué color de colorete te favorece más, puedes elegir tonos más marcados –como el colorete Accord Parfait blush 145 rosewood– si te apetece un efecto más dramático, o en tonos pastel si eres de las que prefiere un acabado natural, como que te dejará colorete Accord Parfait blush 90 luminous rose.
Eso sí, todo dependerá de tu tono de piel y del efecto que quieras conseguir. Otro punto a tener en cuenta es tu tono de piel, si tienes la tez más blanca te favorecerán más los tonos rosados (el tono de colorete 140 rosa antiguo de Accord Parfait es ideal) y si, por el contrario, tu piel tira más a tostada es mejor que te decantes por un colorete con pigmentos tierra o rojizos, por ejemplo, el colorete Accord Parfait blush 200 golden amber.
Eso sí, todo dependerá de tu tono de piel y del efecto que quieras conseguir. Otro punto a tener en cuenta es tu tono de piel, si tienes la tez más blanca te favorecerán más los tonos rosados (el tono de colorete 140 rosa antiguo de Accord Parfait es ideal) y si, por el contrario, tu piel tira más a tostada es mejor que te decantes por un colorete con pigmentos tierra o rojizos, por ejemplo, el colorete Accord Parfait blush 200 golden amber.
Blush draping, un maquillaje muy versátil
El blush draping puede adaptarse al estilo que elijas, desde una fantasía de color o un maquillaje discreto para enfatizar los pómulos y las sienes. El resultado siempre dependerá de cómo de potente quieras el resultado final y del tono de colorete que elijas. Desde los tonos tierra a los ocres –muy otoñales–, los empolvados o los más vibrantes y hasta con brillos iridiscentes –perfectos para citas o eventos–. Si no tienes muy claro cómo de subido quieres tu maquillaje blush draping, puedes empezar con una capa de colorete e ir añadiendo más hasta conseguir el efecto deseado.
Maquillaje blush draping paso a paso
Como te hemos dicho, la técnica blush draping es fácil de conseguir, solo necesitas una brocha y tu tono de colorete Accord Parfait favorito.
● Primero, aplica una base de maquillaje por el rostro previamente hidratado.
● Ahora, elige el tono del colorete Accord Parfait que más vaya con tu piel y una brocha de tamaño mediano o grande.
● Ahora toca aplicar el colorete por los pómulos subiendo hasta la sien con movimientos circulares.
● ¿Te apetece un estilo más maximalista? Puedes conseguirlo con unos pequeños toques en los párpados con el mismo colorete.